Nos encanta postear cuando estamos súper producidos y arreglados, en la mejor playa, fiesta o simplemente nos sentimos más lindos de lo habitual.
¡Por supuesto que algunos nos toma algunas fotos para "escoger" aquella precisa!
El otro día que salí a un bar, me puse a reflexionar cuando 3 chicas, muy atractivas con la mano en la cintura muy a lo modelo de alta costura, se hacían varias tomas de fotos en la misma posición, solo con ligeros cambios, para escoger la mejor para sus redes.
Pero que hay de los días en que amanecemos con algún barrito, andas sin maquillaje y el pelo con frizz, etc. Son o no son parte de nuestra vida cotidiana.
Pues eso fue lo que mostraron a su publico las modelos Stina Sanders y Essena O´Neill quienes comenzaron a subir en sus respectivas cuentas de Instagram sin filtros, con el esmalte de uñas pelado, depilándose el bigote, citas médicas, etc. No perdieron seguidores más bien fueron alabadas por una gran cantidad de ellos por mostrarse tal como son. ¡Mucho más reales!
Que tal y si esa estrategia de transparencia y realidad la traspasamos a nuestras marcas y empresas. Mostrando cuanto nos cuesta el día a día para tratar de dar el mejor servicio posible a nuestros clientes. Las horas de más que trabajamos fuera de horario, con la ropa arrugada para terminar un proyecto, cuando tu auto se daña camino al trabajo y te toca empujarlo, etc.
¿Te atreverías a realizar ese experimento? Mi post de hoy no es un tip, es una pregunta que hago ....
Nos vemos pronto!